Más de la mitad de los lanzamientos de nuevos productos para gatos y perros presentan atributos en salud digestiva (Mintel, 2017), lo cual se ha vuelto algo de «vida o muerte» para todo fabricante de alimentos para mascotas. Aunque existen muchos factores que afectan la salud intestinal, tales como edad, estrés, higiene, medicación y dieta, cada fabricante o minorista debe ser capaz de brindar respuestas y soluciones a las necesidades específicas de las mascotas.
La salud intestinal puede definirse como una «digestión y absorción de alimentos eficaz, una población microbiana en el intestino estable, estructura y función de la barrera intestinal y una función eficaz del sistema inmunitario» (Kogut, 2017).
Los cuatro pilares de la salud digestiva
La patogenia de los trastornos intestinales de las mascotas depende de 4 pilares:
- La microbiota, con un delicado equilibrio y diversidad entre microorganismos comensales.
- Entrada de patógenos del entorno, tales como a través de E. coli, Salmonella, etc.
- Integridad de la pared intestinal, con borde en cepillo, capa mucosa y uniones intercelulares herméticas
- Sistema inmunitario con tejido linfoide asociado al intestino (GALT), que representa el 70 % del sistema inmunitario de gatos y perros
Los factores etiopatogénicos presentes en la salud digestiva
Estos 4 pilares de la salud intestinal interactúan muy de cerca unos con otros. En cualquier momento, en función de la enfermedad, uno o varios de ellos se pueden ver afectados. Durante el desarrollo de una enfermedad, otros pilares pueden afectarse, incluso si el primero pareciera haber vuelto a la normalidad.
Estos pilares están involucrados en enfermedades reales, mecanismos patogénicos que se relacionan con la edad y factores de riesgo, indicados aquí en azul.
Si uno de los pilares se debilita, podrán persistir los problemas, incluso después de la restauración de otro pilar. El problema no se resolverá a mediano o largo plazo si se compensa solo un aspecto de una enfermedad.
Apoyo de la salud digestiva con levaduras
Las fracciones de la pared de las levadura como Safmannan®, actuaran para mantener la integridad de la pared intestinal y el sistema inmunitario, y ayudar a manejar el estrés durante la transición de la dieta en perros al apoyar el nivel intestinal de IgA.
Las fracciones de las levaduras también actuarán en los mecanismos relacionados con la microbiota; por ejemplo, al prevenir el desarrollo de E. coli en perros en crecimiento.
En condiciones como las entereopatías donde hay pérdida de proteínas, los extractos de levadura, es decir, la parte del citosol de estas, como Prosaf®, rico en péptidos bioactivos, nucleótidos y vitaminas, protegerán el borde en cepillo e incluso alimentarán parte de la microbiota.
Descubra más sobre el manejo de mascotas
Artículos sobre mascotas
